Soy Cecilia, mamá, emprendedora y una convencida de que el buen descanso puede transformar completamente nuestra vida familiar.
Magutrot nació mucho antes de tener un nombre. Fue tomando forma a través de mis experiencias, mis desafíos y las etapas que marcaron mi camino.
Crecí siendo la menor de cuatro hermanos y la única mujer. A una edad temprana viví la pérdida de mi papá y un hermano, una experiencia que marcó mi forma de ver la vida y me enseñó a valorar profundamente a mi familia y el tiempo que compartimos. Con los años estudié Ingeniería Comercial y trabajé en grandes empresas, siguiendo un camino profesional clásico… hasta que la maternidad cambió todo.
Cuando nació mi primer hijo, descubrí una nueva versión de mí, más consciente, más sensible y con prioridades distintas. Después llegó mi hija, y con ella una certeza que venía creciendo hacía tiempo: no quería seguir viviendo para ver a mis hijos solamente un rato antes de dormir. La maternidad me despertó y me mostró que había etapas que merecían presencia, no horarios rígidos.
Siempre fui dormilona, y los primeros años como mamá fueron un verdadero desafío. La falta de sueño se volvió parte de mi día a día, y aunque parecía “normal”, no dejaba de preguntarme si realmente tenía que ser así.
El momento que lo cambió todo fue cuando llegó la etapa de sacar el pañal de mi hijo mayor. Esa etapa que tantos papás conocemos: la cama mojada a mitad de la noche, las sábanas que hay que cambiar, la lavadora funcionando a deshoras, un niño despierto y yo tratando de volver a dormir sin perder completamente mis fases profundas de descanso.
Me repetía una y otra vez: “No puede ser que no exista una solución real para esto.”
Ese fue el inicio de mi búsqueda. Empecé a investigar, probar, observar, comparar. ¿Cómo podríamos hacer este proceso más amable? ¿Cómo lograr que los niños —y nosotros— pudiéramos volver a dormir rápido, sin perder la noche entera, sin estrés y sin culpa?
La respuesta no estaba en el mercado. Así que decidí crearla.
Así nació Pipijamas.
Y junto con él, nació también Magutrot, un proyecto que comenzó resolviendo una necesidad cotidiana, pero que con el tiempo se transformó en algo mucho más grande: una marca dedicada a mejorar el descanso familiar, acompañar a mamás y papás reales, y hacer de la noche un espacio más cálido, práctico y lleno de bienestar.
Hoy, Magutrot es el resultado de una historia de amor, resiliencia y propósito.
Es el sueño de una mamá que quiso dormir mejor, y que descubrió que muchas familias soñaban lo mismo.
Y lo más bonito es que esta historia recién está comenzando.